México es un puente entre América Latina y Norteamérica y, en cierta medida, entre los países industrializados y los emergentes. Teniendo en cuenta esta situación privilegiada, México y la Unión Europea colaboran para hacer frente a desafíos comunes como la inseguridad o la promoción de los derechos humanos.
La UE tiene lazos históricos y culturales con México y comparte valores fundamentales como lo son la democracia y el respeto al Estado de Derecho.
El fortalecimiento paulatino de las relaciones bilaterales entre la UE y México bajo las directrices del Acuerdo global llevó al establecimiento de lazos políticos más cercanos. Fue así como se estableció más tarde una Asociación Estratégica.
El Acuerdo global
Las relaciones bilaterales entre la Unión Europea y México se rigen por el Acuerdo de asociación económica, concertación política y cooperación (Acuerdo global) de 1997 que entró en vigor en 2000.
El Acuerdo global sirvió para establecer un diálogo político regular entre la Unión Europea y México.
La Asociación Estratégica
La Asociación Estratégica de 2008 fortaleció la coordinación UE-México a nivel internacional e impulsó las relaciones bilaterales. El acuerdo establece cuatro temáticas: política, seguridad, medio ambiente y asuntos socioeconómicos.