Chile acoge encuentro internacional sobre innovación social en políticas de drogas

Con un llamado a repensar las políticas de drogas desde una mirada más humana, participativa y conectada con las realidades de las comunidades, este miércoles se inauguró el Encuentro Internacional sobre Innovación Social en Políticas de Drogas. La actividad reunió a más de cien especialistas de América Latina, el Caribe y Europa en la Casa Central de la Universidad de Chile.
El evento fue organizado por el programa de cooperación COPOLAD III, una iniciativa financiada por la Unión Europea que busca fortalecer las políticas sobre drogas en América Latina y el Caribe, incorporando el enfoque de innovación social como herramienta clave para abordar desafíos complejos y promover respuestas más sostenibles y centradas en las personas.
Durante la apertura, la directora nacional de SENDA, Natalia Riffo, destacó que este tipo de experiencias, impulsadas por COPOLAD III, han permitido “volver a mirar lo que realmente necesita la ciudadanía”, superando la lógica de las intervenciones aisladas y avanzando hacia políticas más integrales. Afirmó que uno de los grandes desafíos que enfrentan quienes trabajan en el sector público es “diseñar respuestas que dialoguen entre sí y respondan de forma concreta a quienes más apoyo requieren”.
Borja Díaz Rivillas, director del programa COPOLAD-FIAP, valoró que estos espacios abran nuevas formas de pensar las políticas de drogas, haciéndolas más cercanas a las dinámicas sociales. Subrayó que lo más relevante es que las comunidades “no solo participen al identificar los problemas, sino también en la construcción de soluciones que les hagan sentido”.
La Embajadora de la Unión Europea en Chile, Claudia Gintersdorfer, aseguró que este programa representa una visión compartida entre Europa y América Latina. “Las drogas no son un problema que pueda abordarse únicamente con medidas represivas, se requiere una estrategia integral e innovadora que incorpore un componente social, promueva el desarrollo humano y, por supuesto, respete los derechos humanos”, sostuvo.
Desde el Laboratorio de Gobierno, el director Orlando Rojas planteó que la innovación pública no es solo una herramienta técnica, sino “una forma de entender el rol del Estado”. En sus palabras, este encuentro refleja una transformación que ya está en marcha en Chile, donde se busca dejar atrás los modelos verticales para “abrir espacios reales de escucha, colaboración y experimentación”.
Laboratorios para cambiar la manera en que hacemos política pública
El encuentro, organizado en el marco del programa de cooperación COPOLAD III, está dando a conocer los aprendizajes de cinco laboratorios de innovación social implementados en contextos especialmente afectados por el consumo de drogas y/o el narcotráfico: la región del Maule (Chile), Cali y Santander de Quilichao (Colombia), la comunidad indígena Flor de Ucayali (Perú) y el extrarradio de Montevideo (Uruguay).
En Chile, SENDA lidera dos de estas experiencias. La primera, en la región del Maule, aborda el consumo problemático y la salud mental en niños, niñas y adolescentes bajo tutela del Estado, mediante un Portafolio de Soluciones construido en base a escucha activa y colaboración interinstitucional.
La segunda, en La Araucanía, se enfoca en adolescentes y jóvenes, y promueve el co-diseño de una herramienta para el desarrollo de competencias de integración social, incorporando sus propias trayectorias y perspectivas. Este proceso ha contado con la participación de diversas instituciones territoriales, como el Servicio Nacional de Reinserción Social Juvenil, el Servicio de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia, centros de justicia juvenil, servicios locales y redes comunitarias.
Además de compartir los resultados de estos laboratorios, en el encuentro se presentó la nueva Guía de Innovación Social en Políticas de Drogas y una exposición fotográfica y audiovisual en el Patio Domeyko de la Universidad de Chile, que visibiliza el impacto de estas iniciativas en las comunidades.